En L’Ingénuité Vintage Bridal lo tienen claro: la moda nupcial y la moda vintage cada vez están más unidas. Las novias quieren piezas únicas, que cuenten una historia y que estén hechas con un detalle y unos materiales que ya no se ven hoy en día. Hoy hemos podido hablar con el equipo para que nos cuenten más sobre este tema que no para de ganar popularidad.
Para comenzar, ¿Cómo decidisteis emprender en este sector? ¿Qué os llevó a dedicaros a la moda bridal?
Soy periodista especializada en comunicación digital y formada en periodismo de moda, siempre he trabajado en grandes agencias y consultoras con diferentes clientes de lifestyle y lujo. Me he especializado también en historia de la moda y desde siempre me ha apasionado la historia de la moda nupcial en concreto, y he guardado durante algún tiempo algunas piezas que he comprado en viajes con la intención de algún día tener un espacio donde compartir mi pasión.
Llevaba con este sueño unos 15 años, pero nunca encontraba el momento de hacerlo, la vida y el trabajo te va arrastrando y ese sueño llevaba guardado en una parte de mi demasiado tiempo. Hasta que el año pasado, por diferentes circunstancias, creí que era el momento de emprender y dedicarme 100% a mi sueño. En pocos meses ya había coleccionado una selección increíble de vestidos de novia, fiesta y accesorios vintage, y nada puede hacerme más feliz que estas piezas únicas encuentren otras vidas y vivan otros momentos felices.
¿Cómo es el proceso de restauración de un vestido de novia? ¿Os habéis encontrado con algún gran desafío a la hora de acondicionar una pieza?
A la hora de seleccionar nuestras piezas llevamos a cabo una rigurosa selección, nos fijamos tanto en los tejidos como en el diseño y por supuesto revisamos que estén en el mejor estado posible. Nos ha pasado alguna vez que nos hemos enamorado de piezas que tenían algún mínimo detalle que había que restaurar como cremalleras o alguna manchita difícil por el paso del tiempo, pero la prenda era tan especial que no hemos podido dejarla atrás.
Todos nuestros vestidos son acondicionados para que lleguen a su nueva vida en el mejor estado posible. En el momento en que los adquirimos pasan por una revisión, lavado, planchado y reparación si es el caso. Y sí, es un desafío porque tenemos diferentes tejidos, seda, guipur, tul, brocados… no es fácil y son piezas sumamente delicadas. Tenemos la suerte de que la mayoría de nuestras prendas han llegado a nuestras manos en un estado óptimo y en la descripción de nuestros productos siempre está indicado cómo se encuentran y si tienen algún mínimo desperfecto.
En el caso de los vestidos de novia además, antes de su entrega final a nuestras clientas, estos vuelven a pasar por un servicio de limpieza para que luzcan espectaculares en su gran día.



Hemos visto que abarcáis piezas desde 1920 hasta 1990, ¿Cuál es vuestra época favorita de moda nupcial? ¿Con cuál os quedaríais y por qué?
Sí, tenemos piezas tan especiales como nuestras tiaras de novias con flores de cera y azahar que son de principios del siglo XX, son uno de nuestros grandes tesoros y están casi intactas. Pensar llevar una pieza tan cargada de historia el día de tu boda nos parece algo bellísimo para recordar siempre. Para nosotros es difícil elegir una época determinada en cuestión de moda nupcial ya que cada una de ellas ha estado marcada por las circunstancias sociales y reflejada en los diseños y eso tiene un gran valor.
Pero si tuviéramos que quedarnos con alguna elegiríamos los felices años 20 con esos vestidos sencillos sin casi adornos y detalles de encaje, bordados o perlas. Los 60 y la rebeldía plasmada en los vestidos de novia cortos, con faldas rectas y detalles como lazos. Y por supuesto los años 70 y su estilo bohemio, romántico y libre con vestidos fluidos que podían incluir mangas de campana o transparencias.
Cada vez se está extendiendo más la moda vintage, ¿creéis que las novias deberían atreverse más con esta?
La moda vintage está en auge, eso es un hecho y es algo que nos alegra porque apostamos por comprar de forma más consciente, con prendas de más calidad y piezas que probablemente nadie tenga. En cuestión de moda nupcial es algo que en nuestro país no está tan extendido como pudiera ser el caso de otros países como Estados Unidos donde los vestidos de novia vintage son una opción de peso en la mente de las futuras novias. Pero sí que hemos notado que cada vez más, las novias buscan algo diferente, exclusivo y con historia para su gran día.
Nosotros creemos que todas las futuras novias tienen que elegir aquello con lo que se sientan bien, aquello con lo que se sientan auténticas y los vestidos vintage tienen mucho de eso, poseen una autenticidad y una personalidad únicas. La clave es que cada novia pueda encontrar lo que realmente le haga sentirse especial en su día, sin presión por seguir una tendencia determinada. Además, cada vez más novias buscan opciones más sostenibles, reutilizar un vestido de novia en lugar de comprar uno nuevo que solo vas a utilizar probablemente un día contribuye a que vivamos en un mundo mejor.
Otra de las razones por las que animamos a las futuras novias a decantarse por un modelo vintage para su boda, es que muchos de nuestros vestidos de novia vintage fueron fabricados con materiales que hoy en día son más costosos o difíciles de encontrar. Las telas de alta calidad como el encaje de Chantilly, el tafetán, la seda natural y la organza eran más comunes en épocas pasadas y es un lujo poder contar con estos diseños de alta calidad en nuestra tienda.


