Qué lejos quedan aquellos años 80, en los que la mayoría de las mujeres en España se casaban antes de los 25 años y una mínima parte lo hacía después de los 29. Era otro país con otra sociedad. Una España nueva para unas cosas e inalterable para otras, como el momento de pasar por el altar. Si echamos un vistazo siglos atrás, la edad ha variado más bien poco. Si hacemos caso a la web Modernalia, hace 500 años, las mujeres contraían matrimonio de media a los 21 años y los hombres a los 25. En el siglo XVII, ellas también lo hacían a los 21 y ellos un poco antes, a los 24; mientras que, en el siglo XVIII, hace de esto 300 años, las chicas pasaban por el altar -no había más alternativa- a los 22 años y los chicos daban el “sí, quiero” cerca de los 25 años de media. Todo más o menos igual.
Pero la cosa ha cambiado, ¡y bastante!, en los tiempos actuales. Hoy, a los 25, las preferencias son bien distintas y la vida una montaña rusa sin parada fija. En 40 años -los que van desde esos ‘movidos’ ochenta-, la vida y la sociedad española ha cambiado más que en 500. También, como no, en lo que se refiere al capítulo matrimonial. Es más, especialmente en el capítulo matrimonial.
Así que, cuatro décadas más tarde, las españolas deciden optar por el matrimonio casi diez años más mayores, con cerca de 34 (33,4 años de media); y los españoles, dos años después, rozando los 36 (35,6 años de media). Así, al menos, se desprende del estudio Matrimonios de España elaborado por la escuela de negocios TBS Education-Barcelona, que ha recurrido a la Inteligencia Artificial supervisada para recoger y comparar los datos, entre 2013 y 2022, de seis países europeos: España, Alemania, Francia, Grecia, Italia y Portugal.
Griegas y portugueses
Además, concluye que nuestro país es en el que más tarde nos casamos y en el que más ha aumentado la edad de matrimonio. Por cierto, aunque la edad sube en todo el continente, las griegas son las europeas que más jóvenes se casan y en cuanto a los hombres, los portugueses son los más prematuros. Y una última cosa, las mujeres se casan con hombres 2,2 años mayores que ellas, una tendencia generalizada también entre las europeas. Eso, por lo visto, ha sido así a lo largo de los siglos.
Pero si hacemos caso al INE (Instituto Nacional de Estadística), las edades aún se disparan un poco más. Aunque la edad de los contrayentes disminuyó algo con respecto al año anterior, en 2022 la media en los hombres escaló hasta los 39,3 años y en las mujeres hasta los 36,6 años. ¡Rozando la cuarentena!
2022, máximo histórico
Eso sí, no se trata de prejuzgar o extraer conclusiones a la ligera, entre otras cosas, porque la edad no debe predeterminar el número de matrimonios, en el que intervienen otras muchas razones. Es más, en el año 2022 se produjo un incremento sustancial y se alcanzó el máximo histórico en el número de celebraciones en España: 179.107 matrimonios.
Y aunque la tendencia en la celebración de matrimonios aún se encuentra por debajo de los niveles conseguidos antes de la pandemia, las cifras prometen y los resultados empiezan a ser ya significativos.
Respecto al tipo de boda, se está produciendo un alza significativa en el número de enlaces civiles y un descenso en los religiosos. Concretamente, de 2013 a 2022 hay una disminución de más de 15.000 matrimonios religiosos, mientras que los civiles han aumentado en más de 37.800 matrimonios anuales. Hoy, el 81% de los enlaces que se celebran en nuestro país son civiles y el 19%, religiosos.