Rafael Guerrero
Sevilla
Galería
Como buen andaluz, disfruto como nadie de un buen sarao, y las bodas son, sin duda, el fiestón de nuestra vida. Aunque han pasado varios años desde que empecé en este mundo, todavía no hay nada que me emocione más que grabar el primer clip de una boda. Siento la misma ilusión que el primer día, como si estuviera viendo los primeros créditos de una película, pero con la motivación adicional de ser el director de uno de los vídeos más importantes de vuestras vidas.
Me apasiona observar con mi cámara todo lo que me rodea e intentar anticiparme a las emociones humanas. Y lo que más me gusta es volver a casa con la sensación de haber dado lo mejor de mí mismo, sabiendo que he capturado momentos únicos e irrepetibles que serán recordados y apreciados para siempre.