Una boda conlleva una larga lista de acciones y detalles. Entre ellos, hay uno que pude ser clave para el éxito de la celebración. Que será el éxito de todos. Hablamos del mobiliario, el menaje o la mantelería. Hablamos de decoración. Aspectos fundamentales para hacer de esa boda algo personal, único y exclusivo.
Y con ese objetivo nace en 1981 Options, en la actualidad, compañía de referencia en el ámbito del alquiler, entre otros productos, de mobiliario y menaje. A lo largo de esos 43 años, la empresa, con origen en París, ha pasado a estar presente en seis países, a contar con casi mil empleados y, en el caso de Options España, a dar cobertura a cerca de 500 bodas al año.
En BdeBoda hablamos de todo ello con Inés Batlló, responsable de Comunicación y Ventas de Options y elegida por Forbes entre las 55 mujeres más importantes del negocio nupcial.
Options nace en Francia en 1981 y desde esa fecha la evolución de la compañía ha sido constante. ¿Cuáles fueron los motivos de ese nacimiento y cuál es vuestra filosofía en el sector del alquiler de decoración?
Lo has resumido y definido muy bien. Options empezó hace 43 años porque había una falta de personalización en la decoración de las bodas. Antes, una pareja se casaba, iba al lugar de la celebración y lo que se encontraba era un mantel blanco, un mantel gris, una silla dorada y una silla plateada, no había donde elegir. Entonces, el presidente de la compañía vio una oportunidad de negocio y pensó: ¿qué pasa si me empiezo a atrever con manteles coloridos o con otro tipo de sillas? Y así es como creó la empresa.
Es verdad que al principio costó mucho, porque al final hacer cambiar a las personas su mentalidad no es fácil y, sobre todo, a los lugares de las celebraciones. Pero, poco a poco, las tendencias en decoración han ido evolucionando, la moda ha ido evolucionando y lo que prima es la personalización y la diferenciación, mucho más ahora con el tema de las redes sociales. Hemos notado un cambio muy importante desde la aparición de las redes sociales y de internet, donde todo está publicado y se puede ver; ahora un invitado llega a una celebración, hace una foto y la sube inmediatamente a Instagram. Siendo así, en estos tiempos, más que nunca, lo importante es diferenciarse.
Elemento que forma parte imprescindible de vuestra filosofía.
Así es. Nuestra filosofía pasa principalmente por esa diferenciación. Nosotros lo que queremos es diferenciarnos también con nuestro catálogo de productos y eso pasa, por supuesto, por comprar distintas marcas de vajillas, de cuberterías y de cristalerías, pero lo que cada vez más intentamos es hacer nuestra propia fabricación de productos, es decir, diseñar nuestras propias vajillas, diseñar nuestras propias cuberterías, diseñar nuestras propias cristalerías.
De esta manera, cuando unos novios se acercan a Options ven cosas que en otras empresas no encuentran, porque sí que es cierto que hay una serie de marcas que las puedes ver en distintas empresas o que las puedes ver incluso en distintas tiendas o en distintos restaurantes porque son marcas que trabajan de manera general para restauración u hostelería, pero si tú diseñas tu propio producto, eso es algo que es propia marca tuya y lo que más te diferencia, por eso la gente quiere venir aquí.
Diferenciación y exclusividad como reseñas prioritarias de Options. Se trata entonces de personalizar el tono y la respuesta.
Este es uno de nuestros valores clave: la exclusividad y la exigencia. Que el producto sea de supercalidad, por eso intentamos fabricar siempre en Europa y comprar marcas de Europa, no compramos en países que no estén en la Unión Europea. Lo que queremos con esto es ser diferentes, ser exclusivos y ser muy exigentes con el tipo de producto y la calidad que estamos ofreciendo.
Aunque has apuntado algunas claves, me gustaría hablar ahora de vuestro tipo de cliente. A lo largo de estos años, el cliente ha ido cambiado, entre otras razones, como bien apuntas, por la aparición de las redes sociales. Partiendo de esa premisa, ¿cuáles dirías que son las características principales del cliente de Options?
Sí que es cierto que cuando empezamos el tipo de cliente que venía a Options era un cliente de un perfil alto o muy alto. Pero también es cierto que ahora, teniendo en cuenta que cualquier persona o segmento social busca diferenciarse, abarcamos todo tipo de clientes. A medida que hemos ido evolucionando y hemos ido captando clientes de distintas edades y de distintos perfiles, hemos tenido que ir adaptando también nuestro propio catálogo. Esto se traduce en que antes teníamos productos tal vez un poco más exclusivos y ahora, aunque no digo que no sean exclusivos, sí que hemos ido diferenciado mucho más nuestro catálogo.
Tenemos el catálogo Options, que es el genérico, que tiene unas 2.000 referencias y abarca precios medios y altos. Hemos sacado también una línea de productos más básicos, una gama inferior que es más simple y que pasa por un mantel blanco o una vajilla blanca para poder entrar en ese tipo de perfiles, en el que entran los hoteles, restaurantes…
Y el complicado y competitivo mundo de los eventos.
Exacto, los eventos. Luego tenemos una línea más joven, divertida y desenfadada que es el catálogo de Vaisselle Vintage, que es la vajilla antigua. Esto ya no es ni fabricación propia ni compra, sino que se trata de rescatar piezas antiguas de más de 100 o 150 años, con lo que accedemos a otro tipo de cliente que busca más lo que es la pieza reciclada, que busca cosas del pasado. Se trata de un público mucho más joven, atrevido y divertido.
Está la línea Collection, que en nuestra página web y en nuestro catálogo viene diferenciada por un sello de oro. Hablamos ya de productos de una línea muy exclusiva, porque son colaboraciones que hacemos con firmas de moda o de lujo, como Versace o como Crystal Lacroix. Y luego tenemos la línea Pops, que es una línea muy divertida, para gente joven que alquila directamente desde la web. No hay un asesoramiento detrás de estos pedidos, porque simplemente el cliente entra en la web, se crea una cuenta, hace su lista de la compra como si estuviese en un supermercado, lo viene a recoger y lo viene a devolver.
Así pues, tenemos el cliente más joven, minimalista, que no le gusta lo recargado, pero le gusta lo divertido. Tenemos el cliente más alternativo, con toda la parte de vintage y de piezas rescatadas con muchos años de antigüedad. Tenemos al cliente de lujo; el catálogo genérico con precios medios y altos; y la gama básica. Así que, un amplio abanico de público potencial.
Teniendo en cuenta esa amplia gama de clientes, ¿cuál dirías, por tu experiencia, que es el camino por el que en la actualidad transita la decoración y qué demandan esos clientes para una boda?
Pues cada vez más se vuelcan al catálogo genérico de Options, que es el que más gusta, aunque la línea vintage también está gustando muchísimo. Estamos cada vez más evolucionando hacia el tema del reciclaje, de dar valor a los artículos que tienen una historia y que cuentan algo. Cada plato habla, cada copa habla, cada sofá habla y esto es lo que está teniendo éxito.
Lo que encaja con una tendencia social muy actual, que va en esa línea de recuperar las esencias del pasado.
Exacto. Y luego, a esta línea de productos hemos añadido otra cosa. Como cada vez es más complicado encontrar piezas antiguas porque van desapareciendo, una idea que hemos introducido, adaptado, es todo lo que está pintado a mano o hecho a mano. Lógicamente, tienen un precio más elevado, pero hay clientes que están dispuestos a pagar algo que está hecho a mano, que no es una producción en serie ni masiva. Entonces, se trata de rescatar piezas del pasado o bien recurrir a piezas actuales pero elaboradas a mano con materiales nobles.
La compañía está presente en seis países. ¿Hay mucha diferencia, desde el punto de vista de la decoración para bodas, entre los diferentes países en los que estáis asentados? ¿Cambian mucho los gustos?
Sí, hay diferencia, sobre todo con los estampados. Por ejemplo, en España se lleva mucho el mantel estampado de flores, de cuadros, de rayas, de hojas. Aquí en España nos atrevemos mucho, algo que tiene que ver con la luz, con la alegría del país. Sin embargo, en Inglaterra, en Bélgica, en Suiza, en el norte de Francia, son productos que no entienden, que no encajan y buscan líneas mucho más sobrias, elegantes, colores más apagados, líneas más rectas. Con quién sí tenemos una similitud es con el sur de Francia, con toda la zona de la costa mediterránea, donde sí entienden un poco más los colores alegres y los estampados.
Por otro lado, sí que es cierto que con la globalización estamos recibiendo cada vez más clientes de todo el mundo, que vienen a casarse a España justamente por el clima, por la gastronomía, por la alegría del país. Entonces, notamos más presencia de artículos que antes no se llevaban tanto, como son los dorados, los plateados, los espejos, que en España no gustaban tanto porque aquí se lleva más la madera, los ratanes y, como te comento, todo lo que tiene que ver con los estampados y los colores muy vivos.
Nos hemos contagiado un poco de París, de Londres, incluso de Ginebra, donde utilizan mucho los dorados, los espejos… porque el lujo allí está mucho más presente y se está incorporando aquí por ese cliente internacional que viene a casarse a España o que ya vive en España.
Ese es un tema que ya hemos abordado en BdeBoda: España y, concretamente, Madrid como destinos del turismo de bodas. Entiendo que también en Options estáis captando esa tendencia y como España se está convirtiendo en un país de referencia para el turismo nupcial.
De hecho, ahora estamos trabajando ya en el catálogo del año que viene y viendo toda la tendencia para para el próximo año. Tenemos un departamento de compras específico formado por unas 15 o 20 personas que están todo el tiempo inspirándose, buscando tendencias y analizando cada mercado.
De repente, cuando hace un mes nos pasaron todas las propuestas empezamos a ver unas mesas de espejo con dorados y decíamos ¡madre mía!, pero realmente debemos tener estos productos porque aquí viene, sobre todo a Madrid, Cataluña, Baleares y Andalucía, mucho cliente americano y asiático, y eso es lo que ellos piden. Es la tendencia en Estados Unidos, en Shanghái, en Dubái, en Emiratos Árabes… Entonces, estamos incorporando estos artículos porque los demandan.
Háblame ahora de cómo planteáis las tareas desde que el cliente se pone en contacto con vosotros, ¿cuáles serían esas etapas de trabajo?
Normalmente, los clientes contactan a través de la página web, a través de Instagram o porque localizan algún teléfono del equipo comercial. Lo primero que hacemos es preguntar cuándo se casan, en dónde, si es una boda de mañana o de tarde, qué estilo están buscando y si viven, ahora que estamos hablando de España, en Madrid o Barcelona para poder quedar con ellos en el showroom, porque es importantísimo ver los tejidos, las calidades, los colores o la gama cromática. Siempre intentamos que, primero, vengan aquí al showroom para asesorarles con la decoración y con todo lo que son coloridos, tejidos o precios.
Si no viven en España, les ofrecemos el showroom de París, el de Londres… tenemos showrooms en 24 ciudades prácticamente con el mismo catálogo, con lo cual, si se casan en Madrid, pero viven en Londres, pueden ir al showroom de Londres a elegir y aquí se tramitará el pedido. Si no es posible, podemos organizar una videollamada o una llamada telefónica. Se les manda un presupuesto con lo que han elegido y a partir de ese momento empezamos a jugar con las cifras, número de invitados, añadir, quitar, etc. Pero siempre intentamos tener una reunión con ellos porque el asesoramiento es clave, al final es decoración.
Antes de la entrevista, me comentabas cómo estáis detectando una tendencia, que responde a un cambio, y es la del incremento de las bodas en los meses de noviembre y diciembre, ¿cómo lo interpretas?
Sí, la verdad es que normalmente la mayoría de las parejas quieren casarse cuando el buen tiempo esté asegurado, que viene a ser mayo, junio, septiembre y octubre, que es temporada altísima. Julio y agosto, es cierto que ya están bajando un poco por el tema del calor, sin embargo, en el norte de España, julio y agosto son meses muy buenos.
Sí que es cierto que, poco a poco, las parejas se están animando a casarse en noviembre y, sobre todo, en diciembre, porque las decoraciones navideñas en las bodas son muy bonitas y elegantes, a la par que los diseñadores sacan vestidos de novia preciosos. Es decir, son bodas muy románticas, muy bucólicas, donde se puede jugar mucho con la iluminación de los candelabros, de las velas, y por eso están cogiendo mucha fuerza.
Es un momento del año que da pie…
También a celebrar. Sí, las bodas de diciembre son muy bonitas.